Formación online en tres capas

El otro día mientras conversaba con un familiar, me comentó que quería crear un curso de formación online para aprender inglés y me pedía consejo.

Después de pensar cómo podría orientarla, vi que lo mejor era explicarle qué la formación online hay que analizarla desde 3 capas: una plataforma de acceso y gestión, unos contenidos formativos y dinámicas de comunicación, seguimiento o tutorización.

 

 

Veamos cómo cualquier iniciativa de formación online en tres capas necesita una combinación en mayor o menor medida de estos 3 elementos. 

 

Plataforma

Cuando nos referimos a la plataforma, lo más habitual es pensar en un campus online o LMS (Learning Management System), pero las opciones son mucho más amplias. Una plataforma, simplemente es un espacio en el cual un estudiante accede y puede realizar un proceso de formación online. Este espacio puede ser tan «simple» como una página web sin ningún tipo de seguimiento o tan complejo como un videojuego ejecutado en realidad virtual.

La plataforma, a su vez, puede tener diferentes herramientas y funcionalidades. Las más habituales serían la gestión de alumnos, creación de contenidos, planificación de cursos y seguimiento asociado a través de evaluaciones y herramientas de comunicación.

Dependiendo de tus objetivos finales, necesitarás una plataforma con mayor o menores funcionalidades. Hay excelentes iniciativas de formación que utilizan Youtube como plataforma. Es obvio que si usamos Youtube no tendremos todas las funcionalidades posibles, pero consigue su objetivo: que personas, de forma remota puedan aprender.

Algunos no lo considerarán formación online (porque no permite evaluar el aprendizaje adquirido, ver el progreso, etc…) pero es una forma de aprendizaje online que hay que tener en cuenta y que es muy utilizada en aprendizaje informal.

 

 

Si estás comenzando y no quieres complicarte demasiado, te recomiendo evaluar estas opciones de plataforma en primer lugar:

• Moodle. Seguramente lo conoces, y sabes que es una de las plataformas más completas. Pero, además, si sabes cómo utilizarlo correctamente, es una herramienta que permite añadir dinámicas de gamificación, integrar multitud de recursos y se conecta con casi cualquier solución. Es open source, fácil de instalar pero como todo, precisa de una curva de aprendizaje.
• Adaptar WordPress para usarlo como plataforma de formación online en tres capas. Con algunos ajustes y plugins, puedes convertir tu blog en una excelente plataforma de aprendizaje.

 

Más allá de los modelos convencionales, otros ejemplos de plataforma de formación online serían:

• Entornos de videojuego como los que desarrolla GameLearn.
• Aplicaciones móviles como Duolingo (aprendizaje de idiomas).
• Espacios de creación de microlearning, como Snackson.
• Plataformas de realidad aumentada, como LearnBrite.
• Youtube o Twitch para la difusión de contenidos y/o comunicación.
• Zoom, Meet o Teams. Creas un canal, unos contenidos (presentación o debate) y la dinámica es paralale a la implementación.
• Usar redes sociales como Facebook o Linkedin como canal de comunicación, usando la funcionalidad de grupos y la publicación de contenidos como base de contenido.
• Usar herramientas de comunicación como Whatsapp o Telegram para la comunicación y envío de contenidos.

Si quieres profundizar en el tema de plataformas de formación online en tres capas, además de las opciones que hemos mostrado en el artículo, te recomendamos mirar el concepto LXP (Learning Xperience Platform). En este artículo de Jose Manuel Martín, está muy bien explicado.

 

Contenidos

La creación de contenidos para la formación online tiene un componente multifactorial:

• Objetivos de la formación. No es lo mismo, crear contenidos para un canal de Youtube, para una aplicación móvil de inglés o para un master online. El alcance, formato y recursos serán diferentes.
• Tu perfil de usuarios. Está vinculado a los objetivos de formación. Si pensamos en niños, el tipo de contenido ha de ser más visual, dinámico y multimedia. Si pensamos en adultos, podemos incluir más recursos de texto, toma de decisiones, debates…
• Presupuesto. El coste es diferente si quieres una secuencia de imágenes descriptivas o si necesitas crear una animación 3D. Y por supuesto, muy diferente si usas recursos de catálogo o los has de crear «ad hoc».
• Funcionalidade de la plataforma. Depende de lo que permita la plataforma, podrás añadir más tipos de contenidos y más complejos.

 

 

Contenidos vs interacción

Cuando creas un curso de formación, puedes diseñarlo pensando sólo en el acceso y consulta de un conjunto de contenidos, o bien en diseñar un modelo con interacciones más o menos complejas.

Por ejemplo, un curso online podríamos diseñarlo como una secuencia de acciones: ver una selección de vídeos, realizar evaluaciones a través de exámentes online, hacer un trabajo online conjuntamente con otros alumnos, participar en debates online y entregar un trabajo final.

Si nos fijamos con detenimiento, tendremos que diseñar y crear contenidos para cada una de las fases:

• Grabar o crear vídeos. ¿Con actores? ¿Animados? ¿interactivos? ¿Role play? ¿Conceptuales? ¿Controlamos que lo visualicen? ¿Ponemos algún test al final?
• Crear evaluaciones. ¿Preguntas abiertas? ¿Múltiples? ¿Cómo lo presentamos en pantalla? ¿Que feedback damos?
• Trabajo online. ¿A través de un foro? ¿Con alguna herramienta de trabajo colaborativo? ¿combinando presencialidad con reuniones online? ¿Tutorizado?
• Debates. ¿En la misma plataforma? ¿Usando otros canales? ¿Con seguimiento y puntuación asociada? ¿Lo grabamos para verlo después?
• Trabajo final. ¿Realizado integramente en la plataforma? ¿lo creamos fuera y lo publicamos?
• Tutorización. ¿Libre? ¿Pautada? ¿Con un calendario de avisos?

Como puedes ver, cuando hablamos de contenidos, estamos pensando en multitud de recursos, de diferentes tipos. Dependiendo de tus objetivos, participantes y plataforma, podermos partir de una página sencilla que muestra información y un test final o una estructura compleja de navegación, con arbol de navegación incluído.

Es evidente, como hemos dicho antes, que la plataforma nos condicionará en los contenidos a crear. Si nuestro canal es Youtube, crearemos vídeos, seguramente de menos de 10 minutos de duración y los estructuraemos en secuencias y categorías de acceso libre. Si estamos usando Zoom, crearemos presntacaiones que mostrar en pantalla, usaremos las capacidades de compartir recursos en directo. Y si tenemos un campus online, podremos combinar videoclases, con exámenes y contenidos interactivos.

• Dentro de una plataforma, seguramente tengas herramientas que te permitan crear contenidos: subir e incrustrar vídeos, libros de navegación por contenidos, tareas offline / online, publicación de recursos en pdf… Algunos de estos contenidos dejarán registro y nos permitirán crear una nota final.
• Externo a la plataforma, puedes desarrollar contenidos de diferentes tipos:
  • Gráficos e infografías. Te recomendamos echar un ojo a Freepik y Canvas
  • Vídeos. Grabación del navegador, vídeos animados o conceptuales
  • Interacciones.  H5P, Genially, Edpuzzle, son herramientas que te permitrán crear contenidos de forma rápida y sencilla. H5P y Edpuzzle además, te permiten tener datos de visualizació o seguimiento, si la plataforma lo permite.
• Externo a plataforma pero más profesional. Aquí la herramienta top en España es Articulate Storyline (si necesitas una empresa que te ayude, te recomendamos los compis de Designtraining). Esto requiere una especialización en sí mismo. Otras opciones son Lectora, iSpring, Captivate.

La clave en los contenidos es que puedan comunicarse con la plataforma (dejar trazabilidad). Hotpotatoes, H5P, storyline dejan trazabilidad en la plataforma (nota). Genially por ejemplo no. Así que si tu plan de formación online en tres capas implica que los usuarios pasen por determinados contenidos y los hagan correctamente, tendrás que buscar un recurso y plataforma que guarde esa interacción.

 

SCORM, LTI, xAPI

En elearning, como en otras industrias existen lo que se llaman unos estándares, unas normas que permiten crear contenidos que se comuniquen con plataformas de formación con el objetivo de obtener seguimiento y datos de lo que ha hecho el usuario, y poder evaluar en consecuencia.

El estándar más conocido es SCORM, en versión 1.2 y 2004. Por ejemplo, Articulate Storyline te permite crear contenidos interactivos que se exportan en este formato y que comunican a la plataforma si el usuario ha accedido, el tiempo de decicación y otros valores. Últimamente han aparecido más soluciones como LTI, CMI o xAPI que son aún más potentes que el modelo SCORM (si tu plataforma es capaz de reconocerlos).

 

Dinamización y tutorización

La tutorización es acompañar al usuario en su proceso formativo. Esta tutorización puede ser intensa, suave, activa, reactiva, predefinida, informal… Depende de nuestros objetivos y el resto de condicionantes, necesitaremos configurar una dinámica diferente.

Imaginemos que nuestro curso dura 10 horas y no tiene un calendario fijo, sino que los usuarios se apuntan cuando quieren. Esto implica que hay que pensar en una dinámica que acompañe a usuarios en diferentes estados: los que comienzan, los que están avanando, los que se quedan «inactivos», los que han finalizado.

 

 

• Con una plataforma como Moodle, podremos programar foros, reuniones con el tutor, videoconferencias…. además de contar con canales de comunicación como chats o correos electrónicos.
• Si usamos por ejemplo Whatsapp, la tutorizacíón y dinamización se puede hacer con grupos de alumnos o mensajes individuales, usando el propio canal como plataforma de comunicación.
• Si nuestra intención es usar WordPress, tendremos que pensar cómo interactuar con los usuarios. Quizás por mail, o habilitando un canal alternativo, por ejemplo Whatsapp, para la comunicación y dinamización.

 

Extra: Fundae

Quizás hayas oído hablar de formación bonificada. Esto tiene sentido si tu público objetivo son empresas o trabajadores de una empresa. Aquí hacemos una introducción breve a su funcionamiento.

Cada empresa, cuando paga la nómina de un trabajador, está abonando un % del sueldo a un fondo de formación vinculado a la empresa. El fondo, que agrupa las cantidades de todos los trabajadores de la empresa, puede usar para formación bajo una serie de condicionantes.

Por ejemplo, una empresa de menos de 5 trabajadores tiene 420 euros cada año para bonificarse. Una empresa con 1.000 trabajadores puede tener más de 150.000 euros (dependiendo de los sueldos).

La empresa puede utilizar estos fondos para ahorrarse el coste (total o parcial) de la formación de sus trabajadores. Tanto online como offline. En el caso de la formación online, la empresa puede bonificarse 7,5 euros por hora de formación realizada. Si un usuario realiza un curso de 10 horas, puede bonificarse 75 euros. Si el curso cuesta 90 euros, sólo. le cuesta 15.

Pero para poder bonificar un curso online, este tiene que cumplir una serie de requisitos. Entre otros:

• El curso se ha de comunicar a FUNDAE con antelación (1 semana antes) y se ha de facilitar información previa (datos del curso y del tutor) y posterior (participantes que han aprobado el curso).
• Ha de estar alojado en una plataforma que permita guardar el seguimiento de lo que hace el usuario (por si hay una inspección). Esto también implica identificar al alumno de forma inequívoca y sin posibilidad de error.
• El curso ha de contar con un tutor online que ha de dedicar una serie de horas (acordes con la duración del curso).
• El usuario se puede bonificar si supera correctamente los objetivos del curso, que normalmente suponen realizar el 75% de las actividades del curso.
• La plataforma ha de permitir el acceso para que un inspector de FUNDAE pueda revisarla mientras esté activa (para comprobar que la formación es real).
• Y por último (aunque hay otros requerimientos), la plataforma ha de tener espacios de comunicación como foro, chat o mail.

 

Para saber más

• Plataformas LMS, LXP y TXP: guía para no perderse (observatoriorh.com)

 

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Recuerda, para hacer formación online, necesitas una combinación de estos tres elementos.
Tu decides cómo mezclarlos.